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Lo que ha ocurrido con los productos hortofrutícolas españoles en Alemania es vergonzoso. Una mala política de información y de gestión por parte de uno de los países más “eficaces” del mundo ha conseguido hundir a todo un sector.
Hemos de ser muy conscientes de que lo que ha ocurrido con los pepinos podría haber pasado con cualquier otro producto alimentario, tenemos que agradecer, no sé exactamente a quien, que no se hayan fijado en el cerdo.
Paso imágenes de las portadas de tres periódicos publicados el 1 de junio, uno español, otro francés y finalmente otro alemán. Ese es el día en que la prensa escrita hizo público que los pepinos españoles no tenían nada que ver con el brote de colibacilosis.
La superficie de la portada del periódico alemán, Bild, es de 40cm x 58cm = 2,320 cm2.
La superficie de la portada, dedicada a la noticia de la gastroenteritis atribuible a los pepinos, ocupa 9cm x 8,5 cm = 76,5 cm2. Es decir un 3,29% de la portada.
La superficie de la portada dedicada a la chica del mes de mayo, atribuible a no sé exactamente que, ocupa 13cm x 17cm = 221 cm2. Es decir un 9,52% de la portada, unas tres veces más.
Ustedes mismos.
Con el paso de los días el posible origen del E.coli que provoca el Síndrome Hemolítico Urémico ha ido cambiando;
- Primero los pepinos.
- Después los brotes de soja.
- Parecía que había un restaurante implicado.
- También se especuló con no se sabe exactamente que lío en una feria en Hamburgo.
- Incluso en algún programa de radio he podido oír que la nueva cepa de E.coli es un experimento militar.
- O... humo, al final siempre que hay un “pastel” de este estilo con alemanes de por medio la cosa acaba con una cortina de humo. ¿Alguien recuerda algo sobre el escándalo de las dioxinas?¿Cómo acabó?
Los melones de Frau Merkel son todos los responsables de que todo este lío haya sucedido. Desde la senadora de Sanidad de Hamburgo, Cornelia Prüfer-Storks que dio la alarma infundada, pasando por los responsables de la investigación epidemiológica y acabando por los responsables de taparlo todo.
Lo peor no es la mala gestión que se ha hecho a todos los niveles, lo peor es que las autoridades alemanas tienen la intención de lavarse las manos, no quieren asumir sus responsabilidades ni hacerse cargo de los daños que han causado.
Por cierto recientemente he descubierto que tengo E.coli en las manos. Frau Cornelia Prüfer-Storks, ¿cuál piensa usted que debo cortarme primero? Aquí en España que no somos tan trabajadores ni eficaces como en Alemania dicen que es suficiente con lavarlas con agua y jabón.
El lavado de manos, probablemente es la medida más antigua que se instauro para el control de las enfermedades infecciosas y a pesar del paso del tiempo sigue siendo la más importante.
¿Somos realmente conscientes de la importancia de lavarse las manos? ¿Qué ocurre cuando entramos cerdas a parir en una paridera que no hemos podido lavar?
Con la crisis de los pepinos pienso que la imagen del político de turno comiendo pepinos recién arrancados de la mata, para demostrar su inocuidad, no es nada positiva, equivocan el mensaje. El mensaje debería ser que a la hora de comer, especialmente si el alimento esta crudo, es imprescindible un mínimo de higiene.
Nos queda pendiente un tema desde el mes pasado. ¿Cómo hay que hacer la eutanasia a un cerdo de cebo?
La mejor opción probablemente sea una inyección letal, el problema es que no es fácil disponer de los medicamentos necesarios.
Esto hace que una buena solución sean las pistolas de bala cautiva. Es muy importante tener en cuenta que después del tiro es necesario degollar.
El tiro solo vale para aturdir, produce una conmoción cerebral, que se puede confundir con la muerte, pero que puede ser reversible. No siempre produce una lesión mortal.
Para asegurarnos que no enviamos animales vivos al contenedor es necesario degollar.
Son causa de fallo un mal lugar de aplicación o una pistola poco potente.
No podemos olvidar que julio a nivel deportivo es el mes del Tour de Francia. Parece que finalmente Contador podrá correrlo, afortunado él, lastima por los criadores de terneros. Más ataques para el sector productivo, la única diferencia es que esta vez no son gratuitos.
Al famoso ciclista, solo comentarle que esta vez, si pasa lo que no tiene que pasar, diga que el chuletón viene de Estados Unidos. En principio allí el uso de Clembuterol no está prohibido. Pero que vigile, ya que tienen partidas especiales para la exportación, es de suponer que libres.
